jueves, 26 de abril de 2012

Derribado

La palabra depresión proviene del término latino depressĭo que, a su vez, procede de depressus (“abatido” o “derribado”). Se trata de un trastorno emocional que hace que la persona se sienta triste y desganada, experimentando un malestar interior y dificultando sus interacciones con el entorno.
Para la medicina y la psicología, la depresión se manifiesta a partir de una serie de síntomas que incluyen cambios bruscos del humor, irritabilidad, falta de entusiasmo y una sensación de congoja o angustia que trasciende a lo que se considera como normal.
En el desarrollo de la depresión, lo habitual es que se produzca una combinación entre un elevado nivel de estrés y la persistencia de algunas emociones negativas. El consumo de drogas es una factor que puede incidir en la aparición de un cuadro de depresión.
Las consecuencias más graves de la depresión pueden ir desde el aislamiento social hasta la imposibilidad de cumplir con las tareas laborales, llegando incluso hasta el suicidio. Es frecuente que la persona niegue su problema o que no acepte recibir ayuda.
El tratamiento de la depresión, de todos modos, debe contar con un comportamiento activo del paciente. Por lo general suele incluir sesiones de terapia con un psicólogo o psiquiatra. Éste último puede sugerir, según el caso, el suministro de fármacos con acción antidepresiva.

DI/RE-sonar


Con el C, ayer me di cuenta que funciono con estructura rígida o sin estructura, cuando tengo que moldear cuesta, en el punto medio te presentas, te expones, estás. Cuesta y jode.
De adolescente viví fuera de mi familia para experimentar, aprender, escoger, no regresé nunca. ¿me toca ahora? Mi sexualidad, mi forma de mirar, las cosas que me gusta hacer, proyectar y coleccionar.
Generar nueva estructura, mi estructura.
Disueno, sueno y sueño.  Tengo que resonar.
Ahora pues.. 

Resonar

domingo, 1 de abril de 2012